El tomo que os traigo hoy es
el séptimo de Nura. Sé que van por el noveno, pero por un motivo u otro me he
retrasado un poco con su lectura (creo que estaba empezando a aburrirme). Pero
no os preocupéis, que enseguida me pongo al día.
Y qué tenemos en éste tomo?
Pues la llegada de dos exorcistas (por llamarlos de alguna forma) más a la
serie, que van a buscar a la chica que forma parte del grupo del protagonista y
se enfrentan con él.
Dos personajes que prometen
una entrada de aire fresco, sobre todo por lo que su clan significa en el manga
y por la mala leche que se gastan.
Y luego viene un flashback
sobre el pasado del abuelo, muy bienvenido y que le iba haciendo falta a la
serie.
Me ha gustado, y creo que
mucho. De hecho me ha gustado mucho más que todos los anteriores tomos de la
serie juntos, lo que es mucho decir. No sé, creo que las novedades le han
sentado de lujo, y que por fin empiezo a verle una idea detrás, no sólo ir
dando bandazos.
Ya tengo ganas de leerme el octavo, porque si se parece en algo a éste lo pasaré estupendamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario