Con el post de hoy se acaba éste
ciclo comentando todas las (hasta la fecha) películas de Indiana Jones. Y acaba
con la última película de la saga en ver la luz, allá por 2008 (casi 20 años
después de la anterior).
Con Indiana Jones y el reino de
la calavera de cristal, la pareja creativa Lucas/Spielberg vuelven a visitar la
mitología de uno de los personajes que les ha hecho grandes, y lo hacen con un
Indiana que también se ha hecho mayo.
La historia nos sitúa unos veinte
años después de la última película, con una segunda guerra mundial ya acabada y
un Indiana que sigue buscando reliquias a la par que da clase en la universidad
de toda la vida. Lo que no sabe es que una nueva aventura se acerca a él en la
forma de un chico que le está buscando para que le ayude a recuperar a su
madre, a la vez que desentraña un misterio relacionado con ciertas calaveras de
cristal.
La cosa enseguida se complica y
los protagonistas (es una película más coral) enseguida se ven metidos en faena
para ir avanzando en ésta película de acción y aventuras que intenta homenajear
en múltiples ocasiones las cintas anteriores.
Se trata de una película muy
controvertida, y es que la vuelta de un icono de los ochenta en una película
muy parecida a las antiguas pero con veinte añitos más da como resultado algo
ligeramente bizarro, pero en mi opinión no exento de mucho efecto nostálgico.
La aparición de un hijo bastardo
de Indiana, que es una especie de versión más joven de él, interpretada por el
simplemente correcto Shia LaBeouf y la vuelta de una de las chicas Jones
(también crecidita) le dan a la película un envoltorio de cine más familiar, de
ese más fácil que lo único que busca es que pases un par de horas entretenido. El
hijo macarra y a veces insoportable, y la señora más feliz que una perdiz le
pase lo que le pase.
Éstos dos personajes tienen un
pase, igual que un Harrison Ford más que digno. El problema viene cuando le
sumamos unos malos sin ningún tipo de carisma liderados por una Cate Blanchett
a la que no sé cómo engañaron para perpetrar éste engendro de interpretación.
Vale, los buenos no están mal, la
trama es de aventurillas y los malos son de risa. Qué otro elemento puede tener
ésta película para encender tanto los ánimos? En mi humilde opinión creo que se
trata de su guión. Uno pasado de rosca en casi todas las escenas, con algunas
de las más inverosímiles de la historia del cine (esa explosión nuclear al
empezar con Jones sobreviviendo dentro de una nevera) y un artefacto bastante
poco carismático. Éstos dos elementos, unidos a unos diálogos facilotes y una
broma fácil a cada momento de la película dan a veces la sensación mas de
parodia que de homenaje.
En general es una película
correcta, más comparándola con las anteriores, de las que bebe y a las que
rinde homenaje. Pero uno no puede evitar preguntarse si no hubiera sido mejor
dejar descansar a Indiana Jones, o simplemente retomar la saga Jones con un
descendiente del mismo y modernizar del todo la franquicia. Lo que han hecho es
quedarse a medio camino, dando un producto digno y divertido de ver pero que
queda algo lejos de las dos mejores entregas de ésta saga (y ligeramente por
encima de la segunda).
Vale la pena verla? Yo creo que sí,
total son dos horas. Eso sí, si podéis vedlas todas seguidas (en distintos días)
y podréis compararla con las anteriores con la memoria fresca, que el tiempo lo
mitifica y a veces no era todo tan bonito como lo recordamos.
Valoración Personal: 6,5.
2 comentarios:
¡Neveras voladoras! En serio, flojita flojita y se me hizo larga. Y el final bizarro es decir poco. Pero es Indy y los pigmeos molaron aunque algo larga la persecución.
Sí, lo de la nevera tiene tela, no sé yo en qué estarían pensando XD.
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