El reboot de una franquicia
clásica llevado a cabo por un estudio Español sorprendió a todos por lo bien
que salió y lo bueno que era, siendo, probablemente, el mejor hack and slash de
ésta generación según mi opinión.
Entonces, con una segunda
parte en ciernes salió una especie de entrega puente pero para la portátil de
Nintendo.
Yo no soy muy de portátiles,
pero como me había gustado tanto el primer Castlevania y lo hacía la misma
gente… no pude resistirme.
Es una trama sencilla, algo
que nos contará a través del tiempo y encarnando a distintos personajes de la
familia en distintos momentos, cruzándose entre ellos a veces y viendo desde
distintos puntos de vista el drama de ésta familia.
Como he dicho, la trama no es
el punto fuerte del juego, pero cumple su cometido de empujarnos a seguir
adelante en la aventura, con algunas escenas de vídeo (estáticas) que nos
desgranan los momentos más dramáticos.
Sin florituras y ligeramente
decepcionante, pero suficiente.
Es un juego de scroll lateral,
de esos en los que siempre avanzas de lado, dando una falsa sensación de 3D
gracias a los fondos y al estupendo efecto que sabe dar la máquina.
Y lo mueve con un motor muy
parecido al que vimos en la PS3, pero escalado para la portátil y con bastantes
más bordes de sierra.
Casi diría que en lo que a
músculo se refiere queda algo lejos de los títulos punteros de la consola, al menos
a los que he podido jugar yo. Eso sí, tiene a su favor un buen apartado
artístico, que allí sí que destaca, con fondos muy bonitos y diseños de
enemigos y niveles a muy alto nivel.
Lo mejor de todo es lo bien
que se mueve todo, dando acción a buen ritmo y sin ningún tipo de petardeo.
Parece que han priorizado velocidad y fluidez junto a buen apartado artístico
antes de impresionar por polígonos en pantalla. Creo que es una buena decisión.
El apartado sonoro es resultón,
destacando alguna melodía del genial compositor de la saga.
Resultón, cumplidor y bonito;
pero para nada referente.
Es un avance lateral
eliminando enemigos (con un buen sistema de combos, agarres, esquivas y
magias/objetos), de plataforma en plataforma, con saltos bien medidos y puzles bastante
inteligentes para seguir avanzando.
Es el punto fuerte del juego,
sin lugar a dudas, y da incluso matices según qué personaje estemos controlando
en ese momento (distintas magias u objetos).
Y lo mejor de todo es que al
acabar el juego aún nos quedarán multitud de secretos por descubrir, accesibles
sólo con los poderes avanzados y que nos obligarán a volver atrás para ver
todos los rincones de unos niveles muy bien diseñados y que acaban siendo la
auténtica estrella del juego.
Porque es un gustazo recorrer
éstos niveles, intentando llegar a ese cofre que vemos, o descubrir porqué el
mapa tiene un trozo sin descubrir y al que no podemos llegar.
Unos secretos que se
agradecen, porque es un juego que nos durará apenas 8 o 9 horas si lo que
queremos hacer es ver la trama principal, duración que se multiplica si
queremos hacerlo todo.
Pero tiene una serie de
problemas que evitan que se lleve una mejor nota y que deje un sabor de boca
algo agridulce. La primera son las escenas de vídeo, que lejos de mostrarse con
el motor del juego pasan a ser escenas estáticas para narrar algunos momentos
dramáticos.
Luego está una duración muy
corta si lo que quieres es jugar la trama, trama que deja también un poco que
desear, quedándose en suficiente (drama familiar) y que se aleja de la épica de
su entrega anterior.
Y precisamente es en la
comparación con la entrega anterior donde Mirror of Fate se queda pequeño y
pierde en todos los apartados, así que pensando que es una continuación uno
esperaba algo más, por lo menos un juego igual de bueno.
Seguro que se debe al cambio
de lenguaje necesario para mostrarse en una máquina menos potente, incluso el
cambio de estilo de juego es aplaudible, una buena decisión… pero falla en lo
que más me gusta a mí: la trama.
Una pena, porque los mimbres
son muy buenos, dejando una sensación de juego notable pero que pierde la
ocasión para ser memorable con unos cuantos retoques más.
Espero que éstos retoques los
reciba la siguiente (y última) entrega de la saga que harán los chicos de
Mercury Steam.
Valoración Personal: 7,9.
2 comentarios:
Pues fíjate que a mí el Lords of Shadow me dejó bastante frío. No está mal pero no sé...
En cambio éste me gustó más sólo por presentar un Metroidvania de esos que tanto adoro. No llega a la inmensa calidad de los Castlevania de GBA o NDS pero es una curiosa "interpretación de la re-interpretación" jaja.
A mi (como has leído ya) me pasó al revés. Y ahora tengo el Lords of Shadow 2 en la pila para jugarlo cuando tenga un hueco, aunque, vistos los análisis, miedo me da.
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