Al fin ha llegado a mis manos
el séptimo tomo de Predicador, un tomo que ha costado un poco obtener más por
fiestas navideñas que otra cosa. Pero lo bueno es que ya lo tengo y ya lo he
leído.
Tengo que decir que me ha
encantado.
El tomo en sí gira en torno a
la estancia de Jesse Custer en el pueblo de Salvation, un pequeño pueblo Texano
donde decide tomarse un respiro de tanta persecución y aclarar sus ideas
respecto a lo que ha estado haciendo y lo que debe hacer.
El buen hombre enseguida se
hace Sheriff del pueblo, posición que le enfrentará a un magnate de la
industria cárnica dispuesto a hacer lo que sea con tal de acabar con la mosca
cojonera que acaba de salirse.
Se trata de un tomo más
relajado, sin tanta épica, pero no por ello falto de la acción y la mala leche
que destila predicador. De hecho creo que la historia (autoconclusiva) y las
subtramas que van apareciendo durante la misma (muy chulas) es de lo que más me
ha gustado en lo que va de obra, incluso más que esa batalla en el desierto o
el viaje a Europa.
Me da que el guionista supo
tomarse el respiro necesario antes de la traca final (quedan sólo dos
volúmenes) y lo hizo creando un tomo que tiene un gran valor como lectura
independiente, pero gana cosa mala dentro de la historia general. Totalmente
imprescindible.
2 comentarios:
El viejo del pueblo es asqueroso puajjjj
Pues a mi me encanta XD
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