De serie en serie he empezado
el año fuerte, y ésta es la ocasión de hablaros de Daredevil, segunda serie de
Netflix que veo tras House os Cards.
La serie lleva el sello de
Marvel, y es la primera de un acuerdo entre el canal de pago por internet y la
casa de comics. Como no podía ser de otro modo nos vendrá a contar los inicios
como justiciero de Daredevil, el personaje de toda la vida.
A lo largo de los trece
capítulos que dura, veremos cómo Mat Murdock se va convirtiendo poco a poco en
el personaje que vemos en los comics de la Marvel, y cómo, paralelamente,
Wilson Fisk se convierte en Kingpin.
Se nos narra todo con un gusto
exquisito, de serie buena, notándose en todo momento que hay dinero metido y
mucho cariño. Así, el desarrollo de personajes y de las tramas es digno de los
mejores dramas de la HBO, y los momentos superheroicos son muy escasos.
Veremos la doble vida del
personaje protagonista: abogado de día y justiciero de noche; sin primer en
ningún momento una vida sobre la otra, pero sintiéndose los efectos de ambas en
el personaje de Mat.
Además de tener a un abogado
ciego con poderes que suplen dicha carencia y un megalómano de gustos
refinados, tendremos también unos pocos personajes carismáticos y bien
interpretados como son el amigo del héroe, la secretaria y primera clienta, una
enfermera, un periodista o la mano derecha del villano. Todos tratados de forma
realista y sin caer en ningún momento en la parodia, con reacciones muy
naturales y un casting muy bien elegido.
Para los que esperéis algo
tipo Agents of SHIELD id alejándoos de Daredevil. Aquí prima la seriedad sobre
la diversión, construyendo ante todo un drama rico y profundo y dejando en segundo
lado la figura del superhéroe. Es una decisión muy valiente, que pone la serie
a la altura de las grandes de 2015 y deja una temporada que está entre lo
mejorcito estrenado éste año pasado.
Sé que he sido vago en
descripciones, ni origen de poderes, ni del personaje, ni personalidades de
amigos y enemigos… pero estoy tan convencido que ésta serie os gustará que no
quiero chafaros ninguna de sus sorpresas. Es impresionante lo que ha hecho
Netflix con el personaje, alejándolo de lo que habíamos visto hasta el momento
en el género (está más cerca de Nolan que de la Marvel) y poniendo el Hype por
las nubes para el siguiente personaje elegido en el acuerdo con Marvel: Jessica
Jones.
Y sólo me queda repetiros que
le deis una oportunidad. No os arrepentiréis.
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