Con unos pocos meses de
retraso (menos de los habituales) os traigo la serie de Netflix Jessica Jones,
inmediata continuación de Daredevil (con la que comparte universo, que no
trama) que viene a contarnos la historia de ésta heroína reciente mediante 13
muy buenos capítulos.
La trama gira en torno a
Jessica, una mujer con una fuerza asombrosa que se dedica al oficia de
detective privado. La mujer parece amargada por algo, malhablada, desconfiada,
borracha… una fachada de tía borde y dura para alejar a los demás de ella.
Durante la temporada veremos
cómo éste personaje se va abriendo poco a poco con los que hay a su alrededor
mientras intentan encontrar a un personaje de su pasado, alguien capaz de
controlar a los demás con apenas unas palabras y que anda suelto por la ciudad
de Nueva York.
Y eso es lo que encontraremos,
el toma y daca entre el malvado y la protagonista, aderezado por una serie de
secundarios bastante bien hechos (con sus propios problemas) y que nos
mantendrá enganchados durante toda la temporada.
En el plano técnico nos
encontramos con lo que es habitual en Netflix: dinero bien invertido. Y no es
que sea una serie de grandes efectos especiales, los poderes no requieren un
gran despliegue, pero tanto escenarios exteriores como interiores dan una
sensación de verosimilitud que pocas series tienen.
El casting es bueno en
general, destacando por encima de todos David Tennant como el villano. El actor
inglés lo borda en un papelón que se come la pantalla cada vez que aparece. El
resto están a bastante buen nivel en general (me gustan especialmente la amiga
de Jessica y el vecino yonki).
En cuanto a la protagonista
han cogido a una actriz un tanto peculiar, con una expresión de asco casi
perpetúa que tira un poco para atrás, pero que curiosamente pega bastante con
el personaje, así que no tengo muy claro si hace un papelón o simplemente está
correcta.
Es un producto distinto a la
citada Daredevil, una serie algo más irregular y muy cercana al cine negro, con
algún que otro momento no todo lo bien atado que debería (hay un momento
sangrante durante una pelea), pero que tiene una calidad general tan alta que
la hace totalmente recomendable para cualquiera que disfrute de una buena
serie.
Eso sí, puestos a comparar me
ha parecido mejor Daredevil (no en vano me ha parecido de lo mejor del 2015).
Ahora sólo queda esperar a
Luke Cage, la siguiente serie del proyecto Netflix+Marvel que tan bien les está
saliendo por el momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario