No tengo demasiado claro la
cantidad de tiempo que ha pasado desde que vi la segunda temporada de
Californication, lo único que sé es que han pasado años. El motivo? El mismo
por el que es mejor espaciarse capítulos de 24H: lo poco engancha, lo mucho
satura.
Ésta segunda temporada nos
devuelve a Hunk en toda su gloria, en ésta ocasión ejerce como profesor
universitario mientras intenta recuperar al que sigue siendo el amor de su
vida. Y ya sabéis cómo acaba el bueno del protagonista rodeado de jóvenes
influenciables: en la cama con ellas, y con la mujer del director. No podía ser
de otra manera, y eso le causará más de un problema.
Por otro lado tenemos al
agente de Hunk ganando en protagonismo con cada temporada que pasa. Un pobre
diablo al que ha dejado la mujer, que se ha quedado sin trabajo en su agencia y
al que tratan como un pelele. Digamos que quizá se lo ha ganado, pero es un
personaje tan entrañable que acaba por saberte mal todo lo que le pasa.
En general ha sido una
temporada que me ha gustado bastante, con el humor gamberro y cafre que
caracteriza a la serie y los temas adultos tratados sin tapujos, aunque a veces
derive en un humor más similar al caca culo pedo pis de toda la vida.
Las tramas me han parecido más
interesantes y el que no haya sido una temporada pastelón (como la primera)
ayuda mucho a que el regusto final vaya más acorde a lo que uno ha visto a lo
largo de los 12 capítulos que componen la temporada.
Mención especial merece el
citado final, el único que es lógico y coherente y que podría haber pasado por
mil y una cosas, pero que pasa por algo que vuelve para morderle el culo al
protagonista.
Altamente recomendable.
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