Séptimo tomo de Fábulas que va
a la estantería, una nueva entrega de la historia sobre la guerra entre las
fábulas y el adversario.
En éste tomo la historia se
toma un respiro, un paso lateral para bajar un poco la tensión que se venía
acumulando y que parecía iba a llevar las cosas hacia un final explosivo. Pero
no es un respiro en el que se olvide la trama, simplemente el adversario
recoloca un poco las piezas y se entra en una especie de guerra fría, que
aprovechan algunos de los personajes para solucionar asuntos personales.
Sigue siendo una obra adulta,
con unos personajes profundos e implicaciones morales bastante interesantes, pero
ésta desaceleración me ha pillado con el pie cambiado, y aunque disfruto
sobremanera los capítulos con Lobo y los suyos como protagonistas, esperaba
tener más chicha a estas alturas de la obra.
Otra cosa que no ayuda es el
cambio constante de dibujante, de verdad cuesta tanto darle un apartado visual
uniforme a una obra de éste estilo? Si es un comic mensual! Que les digan a los
japoneses si se pueden o no hacer 24 páginas mensuales con una calidad visual
decente y sin cambiar le dibujante… Es una cosa que me fascina del mercado
americano y que no acabo de entender al compararla con el manga. Que obras como
Vagabond se hayan publicado semanalmente durante años con un dibujo muy por
encima de cualquiera visto en Fábulas hace que me pregunte qué leches hacen los
dibujantes de editoriales americanas…
En fin, como podéis comprobar
el tomo me ha gustado, pero esperaba más, o algo distinto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario