martes, 1 de septiembre de 2020

Bleach #71

 Más y más combates entre los capitanes de las divisiones y los monstruencos con los que los Quincy han

llegado a repartir estopa.

Es verdad que tenemos el final de un combate, el arranque de un segundo y un tercero prácticamente en todo su esplendor, algo que hace que el ritmo del tomo sea trepidante y no de tiempo al aburriemiento.

También es verdad que los personajes "buenos" son de los molones, quitándonos de purria de subcapitanes y tal, lo que hace los combates más interesantes.

Pero eso no quita la sensación de que seguimos estando ante un tomo intrascendente, con villanos puestos para alargar el final de la obra y con poderes sin ningún sentido con las normas que nos han ido dando a lo largo de los años en ésta obra (sobre los Quincy, al menos).

Y es una pena, porque de no ser los enemigos Quincy o de haberse tomado un poco más de tiempo en presentar a ésta especie de guardia pretoriana todo funcionaría mejor, porque está bien hecho.

Lo mejor? Únicamente faltan 3 tomos para terminar.

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