Hoy os traigo otro de esos
tomos que han estado cogiendo polvo durante mucho tiempo en la estantería, de
esos que no te lees porque sabes que queda poco para que finalice la obra y
esperas que ese último salga para leerlo del tirón. Pero como parece que el
ansiado tomo 30 no se decide a salir (aunque parece que lo ha comprado planeta)
os traigo mi opinión del penúltimo.
Lo curioso del caso con éste
tomo ha sido que me he puesto en situación a la primera páginas, no ha sido una
de esas obras que se te van de la cabeza y ya no recuerdas cuando la retomas:
lo tenía todo fresco, así que he entendido perfectamente la ensalada de ostias
que viene en éste tomo.
Sí, el penúltimo tomo de la
espada del inmortal consta casi exclusivamente de combates (3) a cada cuál más
animal o importante para el devenir de los personajes que nos han estado
acompañando durante todos éstos años.
Me lo he pasado teta leyendo
éstos combates, aunque he echado de menos que la trama avanzara aunque fuera un
poquito (pero da igual, sé que en el siguiente se nos contará el final). Es de
esos manga en los que la acción se sigue sin ningún tipo de problema, frenética
pero entendible y acompañada por un dibujo que mejora a cada tomo que pasa,
llegando ya a ser de los manga más bien dibujados que hay en nuestro país.
Aun es algo pronto para hacer
una reseña (falta un tomo) pero creo poder adelantar que es de lo mejorcito que
uno puede encontrarse ambientado en el Japón feudal, y encima con ese toque
sobrenatural tan chulo que tiene la obra gracias al protagonista.
No puedo esperar a que salga
el siguiente!
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