Quinto tomo ya de Happy que os
comento aquí en el blog, y ya os adelanto que es el que más me ha gustado hasta
el momento.
Lo primero que llama la
atención es lo que se ha separado de la serie que “copiaba” del mismo autor,
porque lo que le pasa a ésta muchacha no tiene nombre, una putada tras otra, y
cuando crees que va a salir, otra más.
En éste sentido es en el que
más me está gustando, porque me esperaba un manga de deporte al uso, y éste no
sigue el patrón habitual punto por punto (que acabará haciéndolo no me causa
ninguna duda).
Por si fuera poco en éstas
trescientas páginas no sólo está el torneo del balneario en el que juega con
zapatillas que no tocan, tenemos también al entrenador desatado, le posible desahucio,
las consecuencias, nuevos personajes… en fin, un montón de elementos que hacen
que más del 80% del tomo sea enteramente disfrutable.
El resto son momentos de
enviarlo a la mierda por darle otra patada en la espinilla a la pobre
protagonista, o por las reacciones de según qué personaje (la némesis da un
asco increíble).
Pero lo importante es que me
he lo he leído de una sentada, algo más de una hora y cuarto sin despegar la
vista de sus páginas, la primera vez que me pasa con ésta serie.
En el global de los cinco
tomos leídos hasta el momento está quedando un manga de tennis con bastantes
elementos de drama e incluso algunos de comedia (en éste tomo me he reído dos
veces a carcajada limpia), con lo que no me queda más que recomendarlo incluso
para los que ya conocen la otra obra de deporte de éste autor (Yawara!).
PD: El precio de éste manga es algo alto para las páginas que ofrece, eso hay que concedérselo. Una pena porque con tres euretes menos sería ya una compra cuasi obligatoria.
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