Hoy os traigo la cuarta
temporada de una comedia de segunda línea, una de esas que viene bien tener
para cuando te queda un hueco entre series mejores.
Ésta cuarta temporada
podríamos decir que no gira alrededor de nada, pero sí que tiene pequeñas
secciones según los personajes con los que van saliendo cada uno de los
protagonistas, así como el tema de la policía de Winston.
Como comedia sigue funcionando,
con personajes cada vez más caricaturizados por unos actores que hacen un buen
papel con el material que tienen. Una temporada simpática sin más que sigue
apoyándose demasiado en esos actores y no acaba de explotar con capítulos
redondos.
De los personajes sigue
sobrándome bastante Entrenador (se llama así) y por suerte se lo han pasado por
la piedra y no saldrá el año que viene. Entre el resto creo que la dinámica es
suficientemente buena como para que éste pequeño cambio suba un poco el nivel
medio de la serie.
Una serie muy blanca, para
todos los públicos incluso teniendo algún chiste de índole sexual, pero es tan
tontorrón que no escandalizará a nadie.
Una Friends sin su carisma,
que pese a no ser ninguna maravilla sigue renovando (con Megan Fox confirmada
en la quinta temporada, por embarazo de la actriz principal) y que ves por
inercia y con cierto placer, así que por mí puede durar indefinidamente.
La recomiendo? Sólo si sois
unos enfermos de las comedias de 20 minutos y no os importa ver una más.
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