Fijaos que al final me va a
hacer hasta pena volver a terminarme ésta obra, y no es que el tomo que os
traigo hoy haya estado especialmente brillante, es que les he cogido mucho
cariño a los personajes protagonistas, se me hacen carismáticos como los de pocos
shonen.
En cuanto al tomo,
prácticamente se podría decir que gira en torno a tres elementos bastante
potentes.
El primero es el final de la
lucha contra el villano de los últimos tomos. Un final que pese a venirse venir
acaba por atrapar al lector, no en vano se ha compuesto un malo a la altura. Tanto
es así que el autor ha tenido que volver a meter al “malo final” para
recordarnos lo poderoso y malo que era, una aparición que demuestra a las
claras la escalada de poder que ha tenido ésta obra con los tomos.
Por último está la celebración
post victoria, que iría unida al inicio de la siguiente búsqueda por parte del
equipo protagonista, un equipo que suelta lastre e incorpora un nuevo interés
romántico en el grupo. Un personaje muy bien diseñado y que podría dar mucho
juego (que no lo da, pero bueno).
En fin, tomo en la línea de la
obra, con la épica subida desde hace unos tomos y con el final de una saga que
ha estado mucho más entretenida de lo que podría parecer en un principio. Así
sí.
Ahora a ver que nos depara en
los siete siguientes tomos, que esto se acaba!
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