Tenía mucha
curiosidad antes de empezar con éste tomo, el arranque de la segunda saga de
Jojo's y una prueba real para ver si la serie era capaz de reinventarse
manteniendo su base. Y estoy convencido de que lo ha conseguido.
En ésta ocasión
saltamos dos generaciones hacia delante en el tiempo, al nieto del protagonista
original, un chaval que domina el Hamon de forma innata y que acaba de mudarse
a Nueva York con su abuela. Enseguida se verá envuelto en un combate contra
otro ser portador de una máscara, vampiro le llaman, pero eso será lo de menos,
una forma de presentarle a él y a su época.
Lo realmente
interesante es que se ahonda un poco en el origen de las máscaras, con una
especie de demonio primigenio que las creaba para alimentarse de esos vampiros;
un ser que se escapa de nuestra comprensión y que lleva miles de años dormido.
Es una premisa muy
chula, un misterio a desarrollar y que encima nos acaba el tomo abriéndonos un
poco el abanico para lo que será el resto de la saga.
Me ha vuelto a
gustar mucho, y eso que peca de un exceso de combates. Un dibujo curioso,
excesivo y personajes con mucho carisma por bandera: Jojo's sigue molando!
No hay comentarios:
Publicar un comentario