Y pasamos ya del ecuador de
ésta serie con un sexto tomo algo más gordote que los anteriores (lo que se
agradece ya que vale lo mismo).
En éste sexto tomo asistiremos
a una serie de historias aparente inconexas en las que el Señor de los Sueños
no tiene un papel protagonista, simplemente sirve de nexo de unión entre ellas,
ya que todas guardan relación con los sueños de los seres humanos.
Son historias duras a veces,
pero siempre muy bien hiladas y de una gran calidad (destaca tanto por
extensión como por calidad la que nos cuenta parte de la historia de Orfeo, el
hijo del protagonista).
Es la gran ventaja de éste
comic: gira en torno al mundo onírico, lo que implica que cualquier cosa es
posible. Y si encima le sumamos todas las mitologías posibles y añadimos
historias de todo tipo (amor, traición, venganza…) tenemos un volumen del que
no puedo tener apenas quejas.
Y lo que más me ha gustado: se
van sabiendo más cosas de los hermanos de Orfeo, desgranándose lentamente una
trama que promete mucho y que parece venir ya del primer número.
Como punto negativo pondría el
dibujo, que no es para nada malo, pero no es el canon al que estoy habituado.
Eso sí, las variaciones de dibujantes entre historias parecen hechas a posta
para adaptarse mejor a aquello que se nos enseña, con multitud de estilos
gráficos según el momento.
Me gusta, éste clásico moderno
me tiene ya atrapado y sólo me queda esperar a leerme el siguiente tomo para
seguir disfrutando.
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