Mirai es de esas películas que llegan haciendo bastante ruido y se van un poco de tapadillo, una cinta de animación japonesa que nos cuenta la historia de un niño pequeño, que vive feliz en casa con sus padres hasta que nace su hermanita, momento en el que empezarán a suceder algunas cosas extrañas a su
alrededor (como la llegada desde el futuro de su hermana pequeña).
La película nos cuenta la historia del chaval y su viaje de aceptación hacia la figura de su hermana, en una película muy bonita de ver, con un buen sentido del humor y un mensaje claro, que empieza con fuerza, pero que se diluye al final.
Creo, de verdad, que la película tiene prácticamente todo lo que necesita para gustarme: buen dibujo, buena animación, personajes interesantes, un sentido del humor basado en lo cotidiano, algunos toques de fantasía, la familia en su centro… pero también es verdad que se pasa un poco de frenada cuando tiene que terminar.
Esto es un problema para el público occidental bastante habitual cuando se ve cine japonés, pero no creo que yo sea sospechoso de no conocer sus códigos o sus ritmos (la cantidad de producción nipona que he visto es abundante), simplemente creo que en ésta ocasión han apretado un poquito de más con lo onírico.
En fin, una peli corta, amable, divertida y que se disfruta, pero que no te deja el buen sabor de boca que podría dejar debido a su tramo final.
Y ya, que sin decir spoilers es bastante complicado comentar algo más.
Valoración Personal: 7.
Valoración Filmaffinity: 6,5.
Valoración Metacritic: 81.
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