Me veo la segunda temporada
casi seguida después de la primera (ventajas de no descubrir la serie en su
momento) y os traigo mis impresiones al respecto.
El Príncipe Dragón es una
serie de fantasía medieval con un tinte bastante juvenil: personajes
principales niños o adolescentes, acción sin sangre (aunque haya bajas), un
romance, misterios, y un viaje. Cumple
con todos los tópicos de un género que me gusta.
Ésta temporada sigue con el
viaje del grupo protagonista para llevar el huevo de Dragón con los suyos,
mientras huyen de sus perseguidores y van descubriendo alguna cosilla de sí
mismos. Pero no sólo eso, en el país que han dejado atrás siguen pasando cosas,
y el “malo” actual de la serie no para de maquinar y de urdir planes.
El tono de la serie se ha
vuelto un pelín más oscuro, un pelín más épico. Ha subido un peldaño hacia lo
que me gustaría que fuera, pero sin llegar a serlo. Por qué? Pues porque sigue
siendo una serie dirigida al público infantil, y debe crecer al ritmo que lo
hacen sus espectadores. Lo cual es una pena, porque hay misterios y personajes
que apuntan alto, pero que se quedan en segundo plano para futuras temporadas
debido a ese inevitable crecimiento año tras año.
Una serie simpática, que va a
mejor (y seguirá haciéndolo, estoy seguro), con un apartado visual bueno (pero
muy lejos de lo que se puede hacer a día de hoy, o lo visto en Love Death and
Robots), una buena banda sonora y un ritmo adecuado para los 9 capítulos que
dura.
Espero que tengamos serie para
años, porque será allí, en la larga duración donde El Príncipe Dragón puede
llegar a destacar. Ahora mismo es una serie simpática para todos los públicos
con algunos puntos oscuros interesantes que no se explotan.
Valoración Media Imdb: 8,51.
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