Sexto tomo de City Hunter y
primero en el que he notado ciertos síntomas de fatiga por mi parte. Y la
verdad es que no tengo claro si es por cosas del manga o porque he leído
demasiado de éste comic en muy poco tiempo (me tomaré un breve descanso)-
El caso es que éste sexto tomo
me ha cortado un poco el buen flow que traía de los tomos anteriores, y sin
hacer nada que no hiciera ya en ellos, creo que me ha agotado un poco la
fórmula habitual.
Ojo, que sigue siendo un buen
tomo y un buen manga, pero las bromas recurrentes sobre el sexo me han hecho
menos gracia, las dos historias me han parecido menos inspiradas y, en general,
me ha dado la sensación de estar un escalón por debajo de lo visto previamente.
La primera parte del comic nos
cierra la trama de la crupier, posiblemente la peor en lo que va de City
Hunter: ni los malos están inspirados, ni la ambientación de juego demasiado
conseguida. Y luego está la segunda trama, que se presenta y desarrolla un
poquito: proteger a una chica cantante de 15 añitos.
De las dos, me quedo con la
segunda, me ha parecido más fresca y un poco distinta a las anteriores, así que
el siguiente tomo espero que siga en la línea de ésta segunda historia.
Y hasta aquí, City Hunter
sigue de notable, pero ésta vez bajo. Seis tomos que me hacen entender el éxito
de ésta serie, y que ya veremos cómo siguen con los siguientes. Hasta la
próxima!
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