Cae con éste la docenita de
tomos de City Hunter, y lo hace con la tónica inaugurada recientemente: dos
historias en un sólo tomo y cada vez más largas.
La primera, que quizá es la
que más gracias me ha hecho consiste en hacer de guardaespaldas de una chica de
las noticias que quiere investigar a cierto capo mafioso. Lo del capo y la
mafia es una simple excusa para darnos un capítulo de humor con las erecciones
constantes de Ryo, aunque en ésta ocasiones tiene un poquito más de miga porque
la chica en cuestión tiene carisma y no es un simple florero (además de que
cada vez parece dibujarlas mejor).
La segunda historia parece que
ya la hayamos leído: guardaespaldas de una menor (modelo) que al cambiarse de
ropa atrae a Ryo. De nuevo su miembro parece tener más peso que él (hasta le
hace levitar), pero la chica no acaba de tener el gancho de la anterior (de
momento) y la inclusión de un niño coñón... tampoco acaba de atrapar. De todos
modos sí me ha parecido mejor que las historias del tomo anterior.
Es curioso, porque sigo
leyendo ésta obra y siempre es lo mismo: chica guapa, erecciones de Ryo, golpes
con el martillo de Kaori... acción y humor. Incluso los casos son parecidos
(guardaespladas de chicas atractivas). Pero hay algunas historias con un poco
más de gancho que otras, y normalmente dependen de lo bien definidas en su
personalidad que estén las chicas en cuestión.
En fin, veremos el tomo 13 qué
tal, me conformo con que sea tan entretenido como han sido los doce anteriores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario