jueves, 15 de septiembre de 2016

The Strain T2

Segunda temporada de The Strain, esa serie basada en unos libros de Guillermo del Toro y que nos cuenta la historia de una plaga de vampiros desatada sobre la ciudad de Nueva York. Plaga a la que parecen hacer frente sólo unos pocos.

Ésta segunda temporada gira en torno a la existencia de un mítico libro que guarda el secreto de la creación del vampiro supremo y, posiblemente, sobre cómo destruirlo. Éste libro lo querrán tanto el grupo de protagonistas como el Amo (el malo) y el Consejo de Ancianos (otros vampiros menos malos).

Digamos que eso sólo es una excusa para que veamos a unos personajes ya conocidos haciendo frente a la amenaza a la par que van estrechando lazos. Y es que no podía ser que los humanos dejaran de intimar entre ellos en pleno apocalipsis vampírico.

Sigue siendo una serie de un nivel bastante bajo, una serie malilla pero que tiene el carisma suficiente para molar incluso teniendo eso en cuenta. Las tramas son bastante risibles, aunque la mezcla de flashbacks y el que cada cual vaya a lo suyo hacen que los capítulos pasen la mar de bien. Además, los personajes molan (desde el vampiro que caza vampiros hasta el viejo), y tienes curiosidad por ver qué les sucede a continuación.

Lástima de unos cuantos puntos que hacen que la cosa sea un poco menos molona. Para empezar en niño coñón que debería llevar muerto desde el primer capítulo, una trama absurda que no se acaban de quitar de encima y luego está la relación del viejales, muy poco creíble no sólo por la relación en sí, sino por cómo se comportan ambos. Quitando éstos elementos sonrojantes de malos que son nos queda una serie que se deja ver, que divierte y que tiene clarísimo cuáles son puntos fuertes: vampiros, personajes molones y un trasfondo interesante. Más allá de eso no hay que rascar.


La recomiendo? Sólo si os va la marcha y no os importa ver cosas que no están del todo bien hechas, serie B de vampiros. A mí me ha gustado más que la primera temporada, y eso que durante muchos capítulos no estaba claro hacia dónde iba.

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