Lo admito: la primera Blade
Runner me parece una de las películas más sobrevaloradas de la historia, y os
lo dice alguien que la ha visto más de una vez y se ha escuchado algún que otro
podcast para entenderla y valorarla mejor. Y entiendo sus virtudes, pero me
parece una película fallida como tal.
Así que mis expectativas con
ésta secuela eran más bien escasas.
Estamos ante una película que
sucede bastantes años en el futuro de la película anterior, con una serie de
sucesos que han cambiado el mundo y han hecho que sigan siendo necesarios los
cazadores de replicantes.
Seguiremos a uno de dichos
cazadores (que a su vez es un replicante de nueva generación), un tipo que
descubre una cosa bastante perturbadora, una cosa que podría cambiar al mundo
para siempre y que debe seguir investigando, algo que le supondrá un coste
personal tremendo.
Básicamente nos encontramos
ante una evolución y puesta al día de las ideas de la primera entrega. Una
trama que podría funcionar (tiene muchos elementos interesantes) pero que se me
hace un relato fallido por su falta casi absoluta de ritmo narrativo.
Creo que es de esas películas
que adoptan el ritmo lento para intentar ser contemplativas, meterse más en la
mente del personaje... pero es un tipo de lenguaje que me repatea y, aunque lo
puedo compartir en algunas producciones (como la serie The Wire) no creo que
sea necesario en ésta.
Desde el punto de vista formal
no tengo ni una sola queja: es visualmente impecable, trasladándote a la
perfección a un mundo que puede ser perfectamente una sucesión lógica del que
ya conocimos. Banda sonora continuista, grandes decorados, efectos especiales
intachables... por aquí no me quejaré.
En lo que hace referencia a
los actores tampoco le pongo fallos. Ryan Gosling está toda la película
prácticamente inexpresivo (algo que le sienta bien) y el resto cumple sobradamente
con lo que se les pide (me han gustado especialmente Dave Bautista y Ana de
Armas).
Vamos, que siendo una película
que lo tiene todo para funcionar se me ha hecho aburrida como una ostra. Escenas
excesivamente largas, momentos de cámara cuasi fija en los personajes, acción
normalita... una película de dos horas tres cuartos a la que le sobra
clarísimamente un mínimo de tres cuartos, y que se solventa nada ni viéndola a
velocidad x1.2 (creedme, lo he probado, al menos el suplicio pasa más rápido).
No digo que sea una mala
película, digo que no es una película para mí, y como tal no puedo
recomendarla.
Valoración Personal: 6 (le pondría un 3, pero objetivamente me es
imposible ponerle menos de un 6).
Valoración Metacritic: 81.
No hay comentarios:
Publicar un comentario