La periodicidad de
Saga está haciendo que me cueste un poco estar al día y ser capaz de seguir la
historia que nos plantean. Y no es que sea una historia excesivamente compleja,
pero los saltos temporales, de localización, la presentación de nuevos
personajes y repesca de los antiguos... vamos, que al final me lío y me cuesta
un poco meterme de lleno. Carne de relectura cuando esté terminado.
Pero el caso es que
cada uno de los tomos me parecen muy buenos por sí mismos, y me van dando la
sensación de estar ante una epopeya fantástica, una historia gigante que rebosa
imaginación. Puede que no en lo que pasa, pero sí en sus diseños y apartado
visual.
El tomo que nos
ocupa vuelve a girar en torno al segundo embarazo de los protagonistas,
interrumpido en el tomo anterior y que la dejaba a ella con un bebe muerto
dentro. La solución? Ir a un planeta donde se practican abortos.
Pero mientras siguen
sucediendo cosas, el universo no se detiene.
Me gusta la cantidad
de temas que trata, las reflexiones que saca el narrador de lo que le va
sucediendo y el poso que pueden dejar sus historias.
Una gran obra, que
se disfruta menos por la ya mencionada periodicidad pero que sigue pareciéndome
una maravilla. Quiero más Saga, y la quiero para ya.
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