Reconozco que tengo
debilidad por Dragon Ball, un anime que me flipó de pequeño y un manga que
revisito de vez en cuando. Me gusta tanto que hasta os puedo defender Gt sin
vergüenza alguna.
Pero Super se me
atraganta. No tengo claro si es que el arranque es tediosamente lento, si me
faltan las voces a las que estoy acostumbrado o si es mala sin más, pero el
caso es que probé con el anime y fui incapaz de seguir más allá de los primeros
10/15 capítulos a la espera (eterna) de que salga completa en castellano.
Por suerte no me
olvidé de la serie, y escuché que el manga adaptaba el anime dándole mucho más
ritmo y acercándose más a lo que los fans queremos. Y los dos primeros tomos
confirmaban lo del ritmo: era trepidante, bien dibujado y enganchaba. Pero le
faltaba un puntito para llegar a lo que yo quería.
Hasta éste tercer
tomo. Creo que con ésta saga Super no tiene nada que envidiar a lo que hemos
visto en sagas de Toriyama: baja un poco el ritmo para presentar mejor a los
villanos, mantiene el espíritu de la saga y nos da todo lo que le pedimos.
Vamos, que me ha
parecido un grandísimo tomo, que me ha hecho recordar tiempos pasados, con el
plus de que es mi primer acercamiento a ésta historia! Me vuelvo a sentir un
niño.
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