Qué tensión, la virgen, no he
podido dejar de leer hasta que he terminado el tomo, luego he visto que me
quedaban otros cinco y he tenido un escalofrío: esto se tiene que acabar ya, no
se puede mantener ésta tensión tal y como está la trama otros cinco tomos
más... pero bueno, veremos.
El tomo en cuestión termina
con toda la trama del catador que usa venenos y prostitutas para intentar
acabar con los protagonistas. Se nos muestra como un ser despreciable hasta
límites insospechados, que hace bueno y honorable al villano de la historia y
nos avoca a una confrontación épica para ¿el siguiente tomo?
En fin, que me ha encantado
ver la trama centrada en un único objetivo todo el tomo (no como habitualmente,
que tenía varias pequeñas historias bastante costumbristas) y el pulso
narrativo que el autor consigue imprimir.
Comprar ésta obra con lo que
se hacía la misma época en USA es para mear y no echar gota, especialmente en
el uso de la página y el contar las cosas con los diálogos justos, apoyado en
la imagen y la colocación de las viñetas. Parecen obras de décadas distintas.
El mejor tomo hasta el
momento? Puede que no, pero es, sin lugar a dudas, de los que mejor sabor de
boca me han dejado. Me faltan 5.
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