Tras acabar con su segundo poblado y tomarse un merecido descanso; el Conde Dar entendió que si quería tener alguna posiblidad de vencer a una fuerza armada organizada, debería hacerse con los servicios de soldados mas disciplinados que los zombies.
Con ésta intención se dirigió hacia el pueblo con cementerio mas cercano, aún ubicado en el norte. Allí, y tras una rápida batalla contra el único sacerdote sigmarita que guardaba los restos y algunos milicianos. El Conde Dark Lantan utilizó su magia vampírica para levantar de su eterno descanso a algunos de los guerreros de la zona. Una veintena salió de sus tumbas escarbando el suelo, armados con lo que fueron enterrados y dispuestos a luchar una vez mas en el campo de batalla.
Éstos guerreros formaban antaño una compañía del Imperio que luchó durante la última gran guerra contra el Caos, murieron durante la campaña y fueron enterrados en el cementerio mas cercano a su campamento. Unos siglos mas tarde, Dark Lantan les devolvería la energía suficiente para seguir haciendo lo que hacían mejor durante su vida: matar.
Con ésta intención se dirigió hacia el pueblo con cementerio mas cercano, aún ubicado en el norte. Allí, y tras una rápida batalla contra el único sacerdote sigmarita que guardaba los restos y algunos milicianos. El Conde Dark Lantan utilizó su magia vampírica para levantar de su eterno descanso a algunos de los guerreros de la zona. Una veintena salió de sus tumbas escarbando el suelo, armados con lo que fueron enterrados y dispuestos a luchar una vez mas en el campo de batalla.
Éstos guerreros formaban antaño una compañía del Imperio que luchó durante la última gran guerra contra el Caos, murieron durante la campaña y fueron enterrados en el cementerio mas cercano a su campamento. Unos siglos mas tarde, Dark Lantan les devolvería la energía suficiente para seguir haciendo lo que hacían mejor durante su vida: matar.
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