Con éste cuarto tomo seguimos
la historia de Theresa y su paralelismo con la actual de Claire. Es un tomo que
se centra en lo que le cambia a la Claymore el ir acompañada de una niña, cómo
sus prioridades pasan a ser otras y cómo rompe las leyes de la Hermandad.
Es un tomo también que nos da
algo más de información sobre la forma de organizarse que tienen las Claymore,
y lo que sucede cuando alguien no cumple sus normas: le dan caza.
Me encanta la tensión que
transmite éste volumen, que no se limita únicamente a hacer crecer al personaje
principal de ésta parte de la historia, sino que le mete en un momento puntual
donde debe ir hacia una dirección u hacia otra.
Y todo sin olvidar la acción
en ningún momento, que poco a poco sigue mejorando (especialmente el inicio del
combate que hay al final del tomo).
Es de esos tomos que crean
afición por una obra, posiblemente un punto de inflexión en lo que a calidad se
refiere y el momento en el que ya se puede decidir si seguimos adelante con
Claymore o no. Y creo que si habéis llegado hasta aquí seguro que seguís.
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