Sigo mi repaso a la saga con
las versiones Remaster (que seguirá con la tercera entrega) y hoy le toca el
turno a Kingdom Hearts II, la última entrega numerada (con números enteros) de
la saga y la que, en mi opinión, supuso el tope de calidad de la misma. Vayamos
con ella.
Historia: El juego arranca con un personaje que no conocemos, un
tal Roxas, en una ciudad en la que juega con sus amigos. Tiene un día a día
divertido, pero a medida que se acerca el momento de volver a clase se va
encontrando con cosas extrañas: seres que atacan por la calle,
visiones/recuerdos de unos tipos encapuchados…
Es un prólogo para el juego un
tanto extraño, y más para los que no jugaran el juego que hace de puente entre
las dos entregas principales. Pero es un puente que nos lleva de nuevo a Sora,
despertando tras un tiempo recuperándose y volviendo a ponerse en marcha para
encontrar a sus amigos.
En ésta ocasión se tendrá que
enfrentar no sólo a los sincorazón, sino que también estarán los incorpóreos,
liderados a su vez por una misteriosa organización conocida como la
Organización XIII.
A éstas alturas de la saga la
trama sigue siendo totalmente comprensible, y en su mayor tiempo serán pequeñas
historias en cada uno de los distintos mundos que visitemos en la búsqueda de
nuestros amigos (mundos Disney).
Apartado Técnico: Al acercarse a un remaster HD hay que mirar
siempre un par de cosas: desde qué máquina nos llega el juego y que si ha sido
remaster o remake. En ésta ocasión tenemos un remaster de un juego de PS2, al
que se la ha subido la definición y mejorado el tema de los dientes de sierra.
Ni nuevos efectos, ni nuevos modelados, ni nada más.
Y aun así, al jugar con él
consigue hacernos olvidar los años que tiene en casi todo momento.
Gran parte de la gracia visual
de éste juego está en los diseños Disney. Se adaptan fielmente los personajes y
escenarios de las películas, llegando a cambiar incluso la apariencia de los
personajes o los menús de combate para adaptarlos al tono de la película. Éste
toque de dibujos animados, unido a unas texturas un tanto planas (sin ser cell
shading) hacen que el juego haya envejecido de forma realmente envidiable,
llegando incluso a llamar la atención gracias a su estupendo trabajo artístico.
La banda sonora (y el doblaje
en inglés) también ayudan mucho a olvidar totalmente los años del juego. Los
temas originales, sumados a algunos de los más míticos de las películas que van
apareciendo, hacen que la ambientación sea total. Ni un pero que ponerlo en el
apartado sonoro, siendo un referente de la época sin discusión alguna.
Jugabilidad: En la base, lo que nos encontramos en Kingdom Hearts 2
viene a ser lo mismo que viene heredado de su primera entrega. Es decir, un
juego de rol de acción bastante rápido en el que visitamos distintos mundos y
vamos venciendo a montones de enemigos.
La gracia del asunto está en
cómo se ha depurado el sistema de combate, haciéndolo mucho más ágil y
configurable (gracias a mayor variedad de habilidades por equipar) y a un
control que responde muchísimo mejor, especialmente en las fases de
plataformas.
El juego, añade además una
serie de ataques especiales (límites y transformaciones) que añaden mayor
espectacularidad visual. Y por si fuera poco nos va metiendo de vez en cuando
una serie de mini juegos que rompen un poco con tanto combate.
Pero lo mejor del juego es su
ritmo. Tenemos una aventura que fácilmente pasará las veinte horas en una
partida que no busque secretos (que los hay y muchos), pero en la que apenas
pasaremos una hora seguida en el mismo sitio. Así, entre el cambio constante de
escenario, la gran cantidad de escenas de trama y la variedad jugable tenemos
que no nos da tiempo a aburrirnos en ningún momento, porque nos están
sorprendiendo cada muy poco rato.
De verdad que me ha
sorprendido incluso jugado a día de hoy que el ritmo sea tan, pero tan alto,
llegando en algún momento a pensar que porqué juegos mucho más modernos no han
adaptado ésta fórmula (especialmente JRPG de acción).
Vamos, que es muy divertido,
responde a la perfección y siempre estaréis haciendo cosas nuevas o en sitios
nuevos.
Opinión Personal: La verdad es que me he llevado una sorpresa al
ponerme con éste Kingdom Hearts 2. Esperaba un juego más pulido que la primera
parte, con algunos arreglos de los que ya hizo Chains of Memories, pero no
recordaba que fuera tan y tan bueno.
Es una obra que coge todo lo
que hace buena a la franquicia: ambientación, personajes, combate, música,
aspecto visual y lo lleva más allá de lo visto hasta ese momento.
Vale que a día de hoy es un
juego que no hace nada que no hagan otros, pero la gracia del tema está en que
lo hizo mucho antes y cuando te pones a los mandos no sientes que haya pasado
el tiempo por él.
Posiblemente, y es algo que ya
he comentado, lo que más me ha sorprendido es el sentido del ritmo estupendo
que tiene la obra. Haciendo que partidas de tres cuartos de hora o una hora te
dejen totalmente satisfecho, con cambios constantes y una gran sensación de
progresión. Vamos, que es divertido hasta decir basta y no aburre en ningún
momento.
Más increíble me ha parecido
la comparación con un par de Rpg (éstos por turnos) más modernos que he jugado
recientemente (Octopath Traveller y Battle Chasers) dos juegos con los que he
disfrutado, pero que me han parecido inferiores a Kingdom Hearts 2 incluso a
día de hoy.
Con esto os quiero decir que
éste juego es de esos que vale la pena jugar, un punto álgido en una saga que
tiene un rincón en el corazoncito de muchos de sus fans y con unos personajes
que ya forman parte del imaginario colectivo. Puede que en éste juego se
empiece a liar ya la trama un poco, pero también es verdad que tiene un final
que se puede considerar cerrado si sólo juegas al primero, al Chains of
Memories y a ésta entrega, formando una buena trilogía con un broche realmente
de oro.
Valoración Personal: 9,5. Y se la pongo teniendo en cuenta la fecha
del análisis (17/09/2018), que sería un 10 como una catedral en caso de hacerlo
en el momento del lanzamiento.
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